lunes, 1 de marzo de 2010

detener el tiempo


quisiera detener el tiempo
en ese preciso instante
en el que el mundo se para
y sólo estamos tú y yo,
cuando esa llama candente
de la antorcha del deseo,
culmina por fin la cumbre
que escaló nuestra pasión...
*
nuestros cuerpos entrelazados
rozan el límite de la cordura,
y una espiral de sensaciones
arrastra nuestros sentidos
al borde de la locura
*
y en esa cumbre yacemos,
íntimamente abrazados,
recuperando la calma,
disfrutando de la magia
del momento compartido,
que aún reposa entre las brasas

1 comentario:

César dijo...

Fuego puro que incendia! Cuidadín.