lunes, 8 de marzo de 2010

el azar


todavía sonríe el azar, recordando
cuando , travieso, te puso en mi camino,
la música romántica templaba el ambiente
para que tú me invitaras a bailar...
cruzó nuestras miradas,
haciendo uso de su magia,
y dibujó mi sonrisa al decirte que sí,
y supo en ese instante, que su travesura
había hecho diana... y volvió a sonreir
*
apenas nos hablamos,
por miedo a que la magia,
que entraba de puntillas,
pudiera abandonarnos...
yo no necesité deshojar la margarita,
para saber lo a gusto que estaba junto a tí,
tu mano en mi cintura,
me atrajo lentamente,
y en tu hombro mi frente mimosa se apoyó...
y así pasamos horas hasta la madrugada
sintiendo que esa noche Cupido nos tocó

No hay comentarios: